sábado, 12 de mayo de 2012

tiempo de verdades

Siempre que reviso libros, vuelvo  sobre los mismos autores, Nietzsche Hesse, un libro de oraciones de todos los credos y creencias, y no es quizas porque  conozca perfectamente estas obras, sino mas bien poruqe ahi sigo encontrando problemas filososficos que aun no han sido resueltos que aun no han sido conciliados con las ciencia y y con las religiones.
Entiendo las posturas dogmaticas de unos y otros, y seré benevola en cuanto a intereses economicos, pensaré bien, pensaré que no los tienen en verdad, pensaré que se trata de no dar grandes saltos evolutivos, pero sin embargo retrasar ese salto evolutivo que han generado nuestros hijos y jovenes avalados por la vanguardias de tecnologia y filososfia de nuestra generación, es crear una defasaje una brecha irreconciable entre las sociedades modernas y el hombre frecuente, el ciudadano común.
Entiendo que los grandes intereses tanto cientificos como religiosos se niegan a lanzar verdades que no seran comprendidas por la mayoria, sin embargo , es mi cauto criterio estoy en condicones de pensar al menos  sino afirmar que se sorprenderian en cuanto a al conocimiento de algunas verdades ultimas que poseen las gentes sencillas. Esto viene un poco a cuanta de que cada vez que releo a Nietzsche no puedo hacerlo divorciada de su entorno socio familiar y recordar cuanta marginación y fata de commprensión, soledad y enfermedad siufrio este genial pensador que ha modificado y sentado bases del pensamiento existencial de nuestro tiempo. Es verdad que hay verdades que producirian una gran modificación en las estructuras socioeconomicas  de los siastemas pero tambien serian apertura a un nuevo tiempo de alboradas promisorias para todos , un nuevo amanecer del mundo- nuestro nuevo  mundo de amor paz union verdad, un nuevo amanecer para la humidad toda una sonrisa en el rostro del Dios cuando vea que los seres, hemos definitivamente aprendido a amar y respetar la creación sustento vital del equilibrio Universal.

" soñemos volar trascender a una dimensión eterna desplazandonos con nuestras energias vitales a través del profundo silencio azul sensación de paz y DIos en el alma"
1998  Maria marcela irigoyen -inedito-

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